Cada paso en la búsqueda de tus sueños debe proporcionarte tanta claridad que puedas contemplarlos como si ya fueran realidades. Así te asegurarás de llegar a tu destino. No te limites a pensar qué quieres conseguir. Diseña un plan de acción con metas y objetivos claros a corto plazo y nunca los postergues. No dejes que tus sueños de siempre se conviertan en pesadillas a causa de tu inactividad, por limitarte a pensar y hablar en vez de actuar a tiempo. Fíjate en qué te produce frustración o desasosiego en este momento: ¿haber dejado pasar la vida pensando siempre en ese sueño que ibas a realizar pero que nunca lograste, quizás por vivir los sueños de los demás y no los tuyos? Si planeas y manejas bien el tiempo, sobrará incluso para llevar a cabo otras actividades.
Así, una vez tengas la firme decisión de actuar y convertir todos tus sueños en hermosas realidades, debes seguir los siguientes pasos. Herramientas sencillas que te permitirán materializar todo aquello que deseas:
1. Cierra las cortinas del exterior y abre las puertas a tu imaginación creativa. Piensa en todos esos sueños que siempre quisiste hacer realidad, pero que quizás ni intentaste por pensar que eran imposibles, por centrar tu atención en que no podías, o por creer a quienes te decían que no lo lograrías. Debes disciplinar tu mente para dirigir toda tu atención y concentración hacia aquello que amas, no a lo que temes.
2. Elige y decide específicamente qué quieres en las diferentes áreas de tu vida. Identifica los sueños que conciernen a tus relaciones con los demás, a tus metas financieras, a tu poder y crecimiento personal, a tu salud y estado físico, y, a lo más importante de todo: la firmeza de tu espíritu.
Tu mente necesita saber en qué debe centrarse antes de empezar el proceso creativo, resultado de aquello en lo que has enfocado toda tu energía, porque es muy sensible a la energía o a cualquier tipo de pensamiento.
Si te dices a ti mismo “Quiero ser feliz y tener muchas riquezas”, pero centras constantemente tus pensamientos en la pobreza y en la tristeza, lo que piensas obedece a un patrón de pensamiento más potente y de mayor energía que lo que dices; por lo tanto, pobreza y tristeza es lo que vas a recibir.
Es importante que aprendas a cultivar, dirigir y dominar tus pensamientos, centrando toda tu atención en aquello que quieres lograr. Si piensas que vas a lograr algo, lo lograrás.
3. Dibuja, pinta y planea en un papel todos tus sueños. Hazlo de tal manera que cuando cierres tus ojos puedas verlos y nítidamente; que puedas sentir con el corazón que ya los conseguiste. Transpórtate con las alas de la imaginación al lugar y al tiempo en que ese sueño se realiza.
Experimenta con los cinco sentidos la sensación de haberlo conseguido; tienes que ser muy específico respecto a lo que quieres, cómo, dónde y qué pasos concretos darás para conseguir tus propósitos a corto plazo. A través de la visualización no sólo expresas con detalle lo que deseas sino que también lo puedes ver. Por eso es tan importante hacer afirmaciones concretas y visualizar profundamente.
Aprende a reconocer en cada paso todos los obstáculos que el camino te impone; piensa que son como peldaños de una escalera y sobre todo oportunidades para hacer realidad tus sueños.
4. Escoge el sueño prioritario. Una vez identificados tus sueños, elige uno de ellos en el área de tu vida que quieres fortalecer. Elabora frases cortas y afirmativas. Repítelas cuantas veces puedas cada día, por un período mínimo de 21 días, hasta que tu mente creativa las asuma como propias y se conviertan en un hábito inconsciente.
5. Decreta tu sueño. No tengas miedo de contárselo a otras personas. Cuando compartes tu sueño tienes la posibilidad de que te ayuden; mientras tanto otras te presionarán y preguntarán por la realización de ese sueño, lo cual te ayudará a ser perseverante, eficiente y paciente.
Es importante que tengas en cuenta que para identificar tus sueños es clave que pienses en aquellas cosas pequeñas y simples de la infancia con las que vibrabas de emoción, sonreías y disfrutabas plenamente, y que por alguna razón en cierto momento de tu vida dejaste de hacer. ¿Qué esperas para soñar nuevamente? Puedes crear todo lo que sueñas. Ponle alas a tu imaginación y a tu creatividad para identificar esos sueños frustrados por las circunstancias de la vida, por la inconstancia y la falta de fe; quizás por una palabra mal dicha de alguien que se opuso a tu sueño.
Busca siempre alternativas y oportunidades, evaluando resultados para así eliminar las cadenas que te impiden actuar y conseguir tu gran sueño. Recuerda que lo que anhelas también te está anhelando a ti; quizás se encuentra justo ante a tus ojos y no te has dado cuenta.